El presidente de Colombia, Gustavo Petro y el relator especial para la Libertad de Prensa de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Pedro Vaca, firmaron una directriz especial sobre los deberes de funcionarios públicos en el ejercicio de la libertad de expresión y el respeto a libertad de prensa.
Sin embargo en una ambivalencia absoluta, no desperdició la oportunidad para criticar algunos medios y de paso hablar, nuevamente de un golpe de estado: “Está ocurriendo de nuevo y hay silencio. Si el poder es democrático, los derechos se respetan. Si el poder no es democrático, se violan”, manifestó el presidente haciendo referencia al caso que se está llevando en el CNE.
Sin aportar pruebas, se pronunció sobre un supuesto plan de golpe de estado en su contra e hizo una breve mención al tema del software “Pegasus” al cual vinculó a supuesta represión en el paro nacional.
Sobre algunas publicaciones y su trabajo periodístico, manifestó: “A quienes Petro no puede criticar. Hay libertad de crítica, pero Petro no puede tener libertad de criticar”.
Acto seguido Petro, resaltó: “No me silencia nadie mientras pueda decir mis palabras, así sea la prensa, Yo firmo eso porque debe haber libertad de expresión, pero al mismo tiempo debe haber libertad de crítica. Si se calumnia alguien debe defenderse”.
