Vahos, resaltó que con el apoyo del Ejercito en las labores de patrullaje, haciendo presencia en zonas de alta incidencia delictiva y colaborando incluso la gestión de inteligencia para desarticular estructuras criminales, la seguridad mejoraría ostensiblemente.
Colombia en general está sufriendo una alto índice de delincuencia en sus principales ciudades y el índice de seguridad está desbordado por delitos como la extorsión, el hurto a personas y los homicidios, que incrementaron en 18%, 8% y 5% respectivamente, en el caso de la capital, Bogotá.
El concejal Vahos, resaltó: “En el marco del Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana resulta imperativo que el alcalde Galán solicite al presidente la intervención y asistencia de la Policía Militar para que haga presencia y brinde el acompañamiento necesario para garantizar acciones contundentes que logren recuperar la seguridad en Bogotá”.
La discusión está dada ya que por ley la función del Ejercito es distinta a la de la Policía, sin embargo en muchos lugares como puentes peatonales, infraestructuras de interés del estado y teniendo en cuenta el incremento de acciones de los grupos al margen de la ley que han aprovechado las negociaciones con el gobierno del presidente Gustavo Petro, para fortalecerse y llegar a las ciudades, bien valdría la discusión juiciosa del tema.
No es nada descabellado que el ejército en algunas horas, sectores y en compañía de la Policía acompañe los patrullajes e incidan inicialmente en crear una sensación de seguridad.