El Partido de la Libertad de Austria (FPÖ), de extrema derecha, obtuvo el 29% de los votos. El Partido Popular (ÖVP), actualmente en el poder y liderado por el canciller Karl Nehammer, quedó en segundo lugar con un 26% de los votos, por la insatisfacción de los votantes con la situación económica y la gestión de temas como la inmigración.
El Partido Socialdemócrata (SPÖ), sufrió una de sus peores derrotas históricas al conseguir solo un 21% y los Verdes, socios menores en la coalición gobernante, también cayeron al obtener solo un 8%.